Los hechos, esto sí que ocurrió de verdad, hacen referencia a una visita que tuvo lugar el 18 y 19 de septiembre, cuando Cristiano viajó Teherán, capital de Irán, para jugar un partido de fútbol. Allí conoció a la pintora Fatima Hamami, que sufre parálisis en el 85% de su cuerpo. Ella le regaló unos cuadros al futbolista y este, como agradecimiento, le dio un abrazo. Algo que en Palestina se considera adulterio. Todo esto quedó recogido en una fotografía que sirvió a un abogado para presentar una denuncia contra el jugador.
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