Marta Chvarri muri el pasado mes de julio en el piso en el que viva en el barrio de Salamanca. Y hoy vuelve a acaparar titulares tras ser la protagonista de Anatoma de…, el programa de investigacin de Mamen Mendizbal (La Sexta). Chvarri se fue sin hacer ruido, como a ella le hubiera gustado vivir. Pero es imposible olvidar que durante casi una dcada simboliz esa especie que hibrid el cuch, las altas finanzas y la poltica. La llamada biutiful que en julio perdi a la protagonista, muy a su pesar, de uno de sus episodios ms memorables. Segn fuentes policiales, su muerte se debi a causas naturales y fue hallada por su empleada del hogar a primera hora de la maana. Era una mujer joven a punto de cumplir 63 aos. Dicen los que la conocan que estaba muy bien. “Estuvimos cenando con ella hace poco y deca que estaba encantada con su nieta”, aseguraron entonces. Philippa, la hija de lvaro Falc e Isabelle Junot, naci a mediados del pasado junio y le haba alegrado la vida.
Para saber ms
Chvarri viva retirada de la vida social, dedicada a hacer collages y cocinando, aunque de vez en cuando las agencias lograban fotografiarla siempre del brazo de una de sus hermanas o de una acompaante. Chvarri no tena buena salud. A finales de febrero de 2013 sufri una grave cada en el bao de su casa que le acarre lesiones en el rostro. La ltima vez que se la vio en un acto pblico fue precisamente en la boda de su hijo. Estaba guapa, sonrea. Y los espaoles volvimos atrs en el tiempo, a esa Espaa que se quitaba a polvos el encorsetamiento del franquismo.
Pocas imgenes representaban mejor la Espaa que haba dejado atrs cierta carcundia como aquella foto que public Intervi el da de San Valentn de 1989. La revista lo titul Lo nunca visto de Marta Chvarri y mostraba la entrepierna de la todava marquesa de Cubas tan slo velada por unas medias de cristal. An as aquella foto dejaba entrever mucho, demasiado para una persona como ella, una nia bien de toda la vida pero educada en la libertad y las ganas de vivir. Marta era el sueo de cualquiera que quisiera cambiar las proverbiales tres “c” (casa, coche y compaera): una rubia espectacular que esculpa su figura en el legendario gimnasio de Laly Ruiz. Tambin tena la naturalidad de la gente bien, esa que est guapa en vaqueros, botas y camisa Polo. Ella, como sus cuatro hermanos, era nieta del marqus de Santo Floro y biznieta del conde de Romanones (y por lo tanto, sobrina de Natalia Figueroa).
Por su padre, el diplomtico Toms Chvarri, Marta tuvo una educacin fuera de Espaa “ms abierta y cosmopolita que el recatado pijero” que entonces se estilaba e Espaa. A los 17 se instal en Madrid y dos aos despus su madre, Matilde, falleci de un derrame cerebral con 37 aos. Marta, que solo tena 19, sufri un mazazo. No fue la nica desgracia que sufri la familia: su hermano lvaro falleci en un accidente de moto en 1991 cuando tan solo tena 28 aos.
Marta Chvarri vio en Fernando Falc, su primer marido, la posibilidad de ser ms libre. Para l ella era un trofeo; para ella, l tambin. El matrimonio dur poco. La diferencia de edad y de experiencias hacan imposible la convivencia. Chvarri era un torrente y Falc un hombre maduro que ya haba vivido todo lo que haba que vivir. Se dice que el matrimonio estuvo plagado de infidelidades.
El final de los aos 80 fue decisivo para el destino de Marta Chvarri. En 1989 tan solo tena 29 aos y la jovencsima marquesa de Cubas era una de esas mujeres con la que cualquier hombre suea. Un tabloide ingls public la instantnea de Intervi en su portada bajo el titulo The knickerless marchioness (La marquesa sin bragas). La foto, un descuido en realidad, haba sido tomada durante una fiesta en la discoteca Mau Mau. Marta no era an consciente de que se haba convertido en una presa para el periodismo del corazn. Dos semanas antes, Diez Minutos sorprendi a Chvarri y a Alberto Cortina, todava casados (ella, con Fernando Falc y l, con Alicia Koplowitz) saliendo del hotel Palais Schwarzenberg de Viena. Aquello le cost el divorcio. Falc se qued con la custodia del nio.
Aquella doble infidelidad supuso un terremoto que hizo que se entremezclaran las pginas del cuch con las salmn. Se dijo en su da que en la publicacin de las fotografas de Chvarri y Cortina estaba la alargada mano de Mario Conde, que entonces no era un ngel cado sino el modelo de los jvenes espaoles.
El periodista Jess Cacho, que tan bien conoce la poca, cuenta a LOC una historia diferente: “Kio tena el 49,5% de Cartera Central que era tenedora de acciones en la que tambin estaban Los Albertos. Cartera Central tena el 18% de Banco Central cuyo presidente era Alfonso Escmez. Mario Conde y Juan Abell plantean la fusin de Banesto con Banco Central, lo que situara a Cartera Central como accionista de referencia del banco”. Sin embargo, hubo un consejo que debi de ser bastante tenso. “Los Albertos no queran la fusin pero Mario Conde apareci con un sobre con fotos de Cortina y de Marta Chvarri volviendo en avin de Viena”, contina. “Cortina y su primo se acojonan y hacen que el consejo de Cartera Central vote a favor de la fusin, pero el proyecto entra en barrena por las fotos de Marta Chvarri en Intervi. El grupo Prisa del todopoderoso Polanco empieza a apoyar entonces a los Albertos frente a Kio, en manos de Javier de la Rosa, para frustrar la operacin”. Y as fue.
Lo que es seguro es que Cortina ces en la presidencia de FCC, la constructora de la que eran propietarias las hermanas Koplowitz. Para su desagrado, Marta se vio envuelta en una nube de popularidad que detestaba. Que sus deslices fueran pblicos le pes mucho ya que no quera daar a las personas que quera. Entre ellas al padre de su hijo. A partir de entonces trat que le repararan lo que se le haba roto. Su intimidad, su vida.
Por las fotos de la marquesa sin ropa interior Intervi pag seis millones de pesetas. Aos despus en los tribunales Chvarri logr que le pagaran 34 millones de pesetas “por violar su intimidad”, una autntica fortuna en aquella poca. No fue la nica batalla que gan a la prensa: en noviembre de 1989 tambin se querell contra la revista poca de Jaime Campmany por publicar unos diarios ntimos de ella y Cortina. En 2002 el Tribunal Constitucional acept que la publicacin haba “daado la imagen social y afectado negativamente su reputacin y buen nombre”.
A partir de entonces Marta se fue retirando de la vida social. Cortina, tampoco era muy aficionado a la vida pblica. En 1991 se casaron por lo civil en Las Cuevas, la finca en Toledo del empresario. Dicen que el escndalo de la foto de Intervi la dej devastada y que Cortina puso a su disposicin todo un equipo legal que le ayud a doblegar a los medios.
Pareca que el affaire con Cortina sera algo ms serio. Sin embargo, cuatro aos despus se separaron.Tribuna y Hola! publicaron la relacin entre el financiero y otra mujer. En el divorcio Cortina se port “como un caballero” con ella. Se comprometi a pasarle una generosa pensin y a sufragarle su modo de vida hasta que… volviese a contraer matrimonio. (Eso dice la leyenda).
Cortina se casara unos aos despus con Elena Cu, pero ella no termin de formalizar vnculo alguno con el empresario Javier Salaverri. Tampoco con Luis Albert, Quique Herrera o Richard Hudson, con quin rompi en 2009. Su ltimo novio conocido fue el inspector de Hacienda Antonio Gutirrez Marcet.
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